Querido COVID: Ganamos

Querido COVID,

¿Porqué, por qué tuviste que venir y arruinarlo todo? Gracias a ti me mandaron a mi casa durante el segundo semestre de mi tercer año de la Preparatoria. Pasé ocho meses en terapia física para recuperarme después de romperme el ligamento cruzado de mi rodilla en mi segundo año de la Preparatoria, todo esto fue para volver a jugar al fútbol, pero cancelaste nuestra temporada. También se suponía que debía ir a Disney con el programa AFJROTC porque finalmente recaudado suficiente dinero para nuestro viaje de fin de año, pero tu también lo cancelaste.

Gracias a usted, muchas empresas tuvieron que cerrar. Todos tuvimos que usar máscara y estar separados 6-pies. La gente abastecía tanto de papel higiénico y de artículos de limpieza que se les acababa el stock. No pude volver a trabajar porque mi jefe estaba limitando cuánta gente podía entrar en el edificio y no podía conseguir otro trabajo porque los lugares cercanos no estaban contratando, por tu culpa era obligatorio llamar y hacer cita por casi todo. 

Por tu culpa, todos fuimos puestos en cuarentena. No podíamos salir y todos estaban asustados, especialmente yo. Recuerdo que mis hermanas y yo estábamos preocupadas porque el trabajo de nuestros padres, les obligaba a andar con otra gente. Me preocupaba que les ibas a enfermar y contagiarnos a nosotras. 

Por tu culpa lavándome las manos y poniéndome desinfectante para manos fue mi primera prioridad antes de comenzar mi día. 

Gracias a ti, me acostumbre tanto a ver a mis amigos y hablar a través de pantallas que ahora cuando conozco o hablo con personas en la vida real me vuelvo socialmente incómoda. 

Gracias a ti no tuve una experiencia de último año de la Preparatoria normal. Tenía que continuar la escuela por la computadora y ver a mis amigos a través de las pantallas. No sólo cancelaste el baile de graduación una vez, sino dos veces. 

Oh COVID, no sabes lo enojada y frustrada que estoy contigo. Pero al mismo tiempo quiero darte las Gracias. Porque al pensar que llegaste al peor momento, te llevaste tantas vidas inocente y enfermaste tanta gente no solo físicamente pero también mentalmente, el mundo dejó de dar vueltas por unos meses, las cosas empezaron a mejorar. 

Las empresas empezaron a abrir de nuevo, pero con una nueva política. Pude acercarme más a mis amigos y familiares a pesar de que estábamos hablando a través de pantallas. Pude dejar de postergar las películas y programas de televisión porque tenía mucho tiempo libre. Redecore toda mi habitación.

Regrese al gimnasio y me deshice del peso de la cuarentena que había subido. ¡Conseguí un nuevo trabajo y un aumento de salario! Empecé a escribir mucho sobre mis sentimientos para poder entenderlos. Explore diferentes géneros de música y programas. Pude pasar más tiempo con mi familia, salir a caminar y ser más activa. 

Incluso pude pensar en lo que quería hacer con mi vida después de terminar de la Preparatoria y que universidad iba a aplicar, después de tener una pequeña crisis y dudas sobre la carrera que quería estudiar, finalmente pude hablar con mis padres y otros parientes y tomar una decisión. 

Aplique a varias escuelas, algunas me rechazaron, otras me pusieron en la lista de espera, 15 colegios me aceptaron. Después de pensarlo por mucho tiempo tomé una decisión y estoy contenta de decir que este otoño voy a asistir a la universidad de Asheville. 

COVID, si pudiera regresar el tiempo a mi primer año de la Preparatoria y hablar conmigo misma, me avisaria de tu presencia. No todo va regresar a la normalidad y ciertamente no nos olvidaremos de esto pero al menos podemos decir que te ganamos.

Atentamente, 

Cynthia Martinez 

Leave a Reply